domingo, julio 11

Mis vecinos II

Anteriormente había hablado sobre mis vecinos y sus peleas-reconciliaciones-sexo. Ese tema lo tengo algo superado, ya que trato de acostarme muy muy muuuuuy cansada para no despertarme con ningún crujido de cama proveniente desde arriba.

Tenía planeado para hoy levantarme muy temprano, tomar desayuno y estudiar para mi examen de mañana, pero mi primer objetivo se vio arruinado porque recien a las 6 y 1/2 pude caer en los brazos de mi querido Morfeo. Si, mis vecinos otra vez, pero no eran sólo ellos! NO!!! tenían una especie de convivencia con millones de voces femeninas y masculinas entre medio, bueno exagero, pero habré reconocido unas 5 o 6 voces distintas? Menos mal que no se trataba de una orgía (viniendo de esos vecinos, se puede esperar de todo), y ya para eso de las 5 am canturreaban unas inocentes canciones antiguas, reconozco que al principio no me molestó porque hizo que me vinieran recuerdos de mi infancia-preadolescencia, cuando me colgaba de mi hna y sus amigos y cantaban chistosamente canciones del ayer...

La cosa es que ya estaba perdiendo un poco la paciencia porque realmente QUERÍA DORMIR!
y en eso comienzan como a jugar al karaoke?... habiendo (con permiso de ustedes) un WN que gritaba!!! creo que hasta los gorilas chillan mejor que este tipo! y es que de verdad, valoro cuando una persona canta "bonito", pero este señor... era un animal! (sin ánimos de ofender a los animales, claro)

No soy de esas personas muy acusetes ya que siempre pienso "tiempo al tiempo" y decidí esperar a que se les bajaran las revoluciones y terminara el carrete, hasta incluso para hacer la hora, pensé en encender el computador y escribir todo ésto, pero mis ojos estaban reacios a abrirse.

Mi sueño no podía esperar hasta más allá de las 6 de la mañana, (además que ya a esa hora, al canto se le habían agregado saltos monisticos) así que me levanté y tomé el citófono para avisarle al conserje de los gritos selváticos que estábamos escuchando la torre E, CUEK! el citófono no funcionaba!!! lo conecté y desconecté, moví algunos botoncitos que tenia ese aparatucho, pero NADA! ... Era mi perdición.

Le mandé un mensaje al Lolo buscando algún consuelo, pero no recibí respuesta, ¿será porque estaba durmiendo quizás?... cómo la gran parte de la gente de este lado del planeta.

En eso, recordé que había guardado hace ya algún tiempo el número de conserjería en mi celular, así que busqué y llamé (rogando a los cielos de que el poco saldo que me quedaba alcanzara para la llamada de auxilio) y lo logré!!!

A los minutos después llegó mi conserje salvador tocando la puerta del dpto de arriba y en tres tiempos se detuvo la música, los cantos y los saltos de gorila.

Por Fin DORM...
Diablos! ya es hora de estudiar ...

1 comentario:

Alís dijo...

¡Qué angustia!
Siempre fui muy condescendiente con los vecinos que hacen fiestas, pero los años no perdonan y hay veces en que realmente se pasan. De hecho, tengo unos vecinos así. No sólo hacen muchas fiestas y hasta las tantas gritando, sino que de madrugada se equivocan y llaman a nuestro timbre. Ya he llamado un par de veces a Carabineros, porque pedirles que se moderen no funciona.
Besos

PD. Perdona por haber tardado tanto en pasarme

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